Publicado en
11 de octubre de 2022
En la era digital, la supervisión y la gestión de los procesos remotos y automatizados son esenciales para mantener el control sobre todos los aspectos de la producción. Por ello, los departamentos de ingeniería clínica están desempeñando un papel más activo al integrar la supervisión remota en sus procesos para mejorar el rendimiento y el tiempo de funcionamiento de los equipos y la infraestructura.
La monitorización remota también le permite tener visibilidad en tiempo real de los problemas u oportunidades que no se pueden abordar desde un único punto de vista. La supervisión de varios componentes de su departamento de ingeniería clínica no solo le permite vigilar el rendimiento, sino también reconocer las oportunidades de mejora de la eficiencia o la eficacia.
Las principales ventajas de la monitorización remota de IONIC Health en los equipos de ingeniería clínica e infraestructura son la reducción del tiempo de inactividad, la predicción y los sensores integrados. Cuando los distintos equipos y dispositivos de sus instalaciones se supervisan a distancia, es más probable que se detecten los problemas antes de que sean críticos.
Utilizando el IoT podemos captar algunos de los problemas más significativos en diferentes tipos de entornos, como la temperatura y la humedad y en equipos como la Resonancia Magnética, la Tomografía Computarizada y los refrigeradores de vacunas. Esto puede ser especialmente importante en entornos de alto riesgo como la Ingeniería Clínica, cuando las tareas importantes y críticas deben completarse sin interrupción.
Al poder identificar un problema con anterioridad, los ingenieros tienen la oportunidad de abordar la cuestión antes de que se convierta en un problema mayor. Por ejemplo, si una bomba falla, las herramientas de diagnóstico pueden utilizarse para identificar la causa del fallo y proporcionar al ingeniero información para iniciar una acción correctiva. Esto permite a los ingenieros responder a la situación con mayor rapidez y estar mejor preparados para futuras ocurrencias del mismo problema.
Los sistemas de monitorización remota permiten a los ingenieros supervisar el estado de los sistemas críticos, como las bombas, los compresores y otros equipos de la instalación. Al supervisar el estado de estos sistemas, los ingenieros pueden recibir alertas cuando hay problemas potenciales. Esto puede permitir a los ingenieros responder a los problemas antes de que se vuelvan críticos, lo que puede minimizar el tiempo de inactividad y mejorar el rendimiento general.
Con el apoyo de hardware y software, es posible monitorear diferentes tipos de ambientes, parámetros (temperatura, humedad, magnitudes eléctricas y electromagnéticas) y equipos, como Resonancia Magnética, Tomografía Computarizada, refrigeradores de vacunas, congeladores, cámaras de conservación, entre otros.
Combinado con el uso de la plataforma de monitorización (nMonitor), permite abrir llamadas, respectivamente, sin la participación del usuario, lo que permite tratar los problemas rápidamente.
En caso de fallo de Internet, los datos se siguen recogiendo, se almacenan localmente durante un máximo de 30 días y, en cuanto se normaliza la conexión, se sincronizan en la nube.
Sensores integrados que controlan todas las variables capaces de afectar a la vida útil del equipo y emiten alertas y notificaciones de no conformidad incluso antes de que el equipo deje de funcionar.
El mayor control, la gestión y la reducción del tiempo de inactividad mejoran la percepción del cliente sobre la calidad del servicio.
Aporta información estructurada a partir del gran volumen de datos recogidos por los sensores, lo que permite el análisis y la actuación temprana para resolver los fallos y reducir drásticamente las posibilidades de que se produzcan tiempos de inactividad y pérdidas económicas.
